Moldeadas en material de policarbonato transparente, estas cubiertas protectoras se recomiendan para zonas en las que exista abuso de un termostato. Esto puede incluir vandalismo, daños accidentales o la costosa y molesta manipulación por parte de empleados e invitados. Especialmente útiles cuando los termostatos se encuentran en zonas públicas, las cubiertas son fáciles de instalar. Los orificios del marco permiten que el aire circule libremente para el correcto funcionamiento de los termostatos o sensores de energía protegidos. Una pared interior en el marco impide que entren objetos y manipulen el termostato protegido.